
Noche de verano, calor.... Una madre y su hijito de 5 años juegan fuera de la casa cazando estrellas fugaces..
El niño atrapa una y la lleva encendida en la palma de su mano, entra a la cocina y deposita dentro de un vaso de vidrio invertido y se va a soñar con la última imagen de su farol de estrella..
Por la mañana al levantarse y al llegar a la mesa se escucha su grito con estupor...
_¡NO! la mosca se comió mi estrella!!! Y lleno de furia la aplastó contra la mesa con la palmita de su mano.. Del interior del insecto surgió un líquido viscoso fluorescente..
_ ¡Viste mami, _exclamó el niño, se la comió y la tenía adentro...
_ hijo era una luciérnaga..
_ ¡No mami!, era mi estrella!!!
Carlos - náufrago-tintadelcorazon
6 comentarios:
Gracias Carlos, muy bonito, es un detalle muy bonito de tu parte, disculpa no pasar tan seguido pero el trabajo no me deja hacerlo...
Saludos...
La imaginaciòn y la inocencia, reunidas en un relato que nos hace sonreir ante la verdad innegable del niño... como explicarle?.
Abrazos de luz.
cuanta inocencia,,, muy hermoso,
yo siempre he querido una estrella..
besos.
Otra vez gracias...
Saludos
Queremos otro cuento...
Saludos.
yotambien quiero otro cuento , que lindo maestro, Besosssss
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